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domingo, julio 21, 2013

ENIGMA DEL JUICIO DE OSIRIS

El juicio de Osiris
El peso de las almas por parte de los Egipcios



La muestra es el libro ilustrado más antiguo que se conserva –año –2.000
El juicio de Osiris era el acontecimiento más importante y trascendental para el difunto, dentro del conjunto de creencias de la mitología egipcia.
En la Duat, el espíritu del fallecido era guiado por el dios Anubis ante el tribunal de Osiris. Anubis extraía mágicamente el Ib (el corazón, que representa la conciencia y moralidad) y lo depositaba sobre uno de los dos platillos de una balanza.
El Ib era contrapesado con la pluma de Maat (símbolo de la Verdad y la Justicia Universal), situada en el otro platillo. Mientras, un jurado compuesto por dioses le formulaba preguntas acerca de su conducta pasada, y dependiendo de sus respuestas el corazón disminuía o aumentaba de peso.
Dyehuty, actuando como escriba, anotaba los resultados y los entregaba a Osiris.
Como se puede observar en la imagen, en la comparación entre el corazón del muerto y una pluma, ésta pesa más que el corazón.


Entre los tantos aspectos a ser considerados en una representación gráfica tan rica, centré el enigma sólo en el peso, que en realidad  es una comparación entre el  peso del corazón  y una pluma.
La curiosidad la genera la pluma de ave utilizada para la comparación, que es el disparador del enigma, ya que induce a pensar en el vuelo o bien en la ingravidez . 
Incluso, es posible que a partir de un nivel en el subsuelo se invierta la gravedad (atravesado el cual era imposible el retorno, tan tratado por los antiguos)
No eran ajena a los griegos las consideraciones relacionadas con el presente tema. Invito a los curiosos a leer “Las Ranas”, la extraordinaria obra de Aristófanes,  en el que se encuentra reflejada parte de la escena, cuando compara las sombras de Esquilo y Eurípides en el Hades.

martes, julio 16, 2013

ENIGMA MAYA

La representación cosmológica Maya, es la materia del presente enigma. Me limito a considerar sólo lo que observo en la reproducción. En primer lugar la esfericidad de la tierra, dentro de un Universo cuadrado, donde se señalan con colores, los distintos puntos cardinales.
En un intento por otorgar sentido lógico a los colores utilizados, me permito interpretarlo de la siguiente forma: rojo el este ( por el fuego del sol); el oeste negro (por la noche después del ocaso del sol), blanco el norte (por ser la zona de la nieve), y amarillo al sur al que no le encuentro explicación, que pudiera ser la lava de loa volcanes existentes en esa zona. Dejo abierto a la consideración de los lectores, encontrar el fundamento del color amarillo utilizado para señalar el sur, así como corregir la interpretación expuesta con respecto a los colores de los otros puntos.



Gráficamente, el universo maya es un cuadrado plano (podríamos pensar en un cubo) delimitado por un lagarto cuyo cuerpo está cubierto de símbolos planetarios. Dentro de este cuadrado se ubica un círculo (debería considerarse una esfera), con tres niveles: el cielo (celeste),  la tierra (verde) y el mundo del subsuelo (marrón) en el que hunde sus raíces un árbol que integra de tal forma a todos.
El cielo tiene siete niveles y el mundo del subsuelo cinco (me permito relacionarlo con los niveles de la Divina Comedia),( y la forma en escalera  con el relato de Er, de Platón),  la superficie de la tierra también esta parcelada en cinco regiones (continentes), el universo sostenido desde sus ángulos,  por seres (sin faldas). El subsuelo habitado por seres (en una posición similar a los contenidos en el libro de los sueños de los Egipcios).
La sabia del árbol que asciende desde el subsuelo, pareciera indicar el camino de los seres que en él habitan.
La forma cuadrada del universo, rodeada por un lagarto y los símbolos que pueblan su cuerpo, son otros tantos enigmas que dejo planteado para su resolución.

La representación de los mayas reúne aspectos realmente conmovedores. Al profundo contenido cosmológico adiciona valores plásticos, estéticos y científicos, así como otros de difícil interpretación.
En cuanto a los puntos cardinales, había dejado para su posterior resolución el significado del color amarillo en el sur, por carecer a esa fecha de elementos suficientes que me permitieran arriesgar una explicación satisfactoria.
Pude observar con posterioridad que los pueblos ubicados al norte de los mayas, que tienen el mar al sur, representan ese punto cardinal con el color azul. 
Los mayas tienen reservado el azul para el cielo y el amarillo para el sur, punto geográfico donde se encuentra la cadena de volcanes, y en consecuencia es posible que se corresponda con la lava y la atmósfera  de las erupciones.
Dejo pendiente consideraciones relacionadas con el  árbol, que como elemento integrador de los tres niveles -subsuelo, suelo y cielo- pone de manifiesto un vasto contenido representativo que exige meditación y por sobre todo información, que espero recibir de los lectores.
Sin pretender vincularlo, y sólo como  hecho curioso, hago mención que  los mayas fueron derrotados por la selva, no existe otra evidencia de la decadencia de este grandioso pueblo.
La Falda, 9 de Octubre del año 2003  http://www.geocities.ws/segunpasanlossiglos/enigmas.html

LA ALEGORÍA DE LA CAVERNA

La Alegoría de la Caverna
 
Sócrates: ...En una caverna subterránea, con una entrada tan grande como la caverna toda, abierta hacia la luz imagina hombres que se hallan ahí desde que eran niños, con cepos en el cuello y en las piernas, sin poder moverse ni mirar en otra dirección sino hacia delante impedidos de volver la cabeza a causa de las cadenas. Y lejos y en alto, detrás de sus espaldas arde una luz de fuego, y en el espacio intermedio entre el fuego y los prisioneros, asciende un camino, a lo largo del cual se levanta un muro, a modo de los reparos colocados entre los titiriteros y los espectadores, sobre los que ellos exhiben sus habilidades.
 Glaucón: Me lo imagino perfectamente. 
 Sócrates: Contempla a lo largo del muro hombres que llevan diversos vasos que sobresalen sobre el nivel del muro, estatuas y otras figuras animales en piedra o madera y artículos fabricados de todas las especies... ¿crees que los prisioneros puedan ver alguna otra cosa, de sí mismos y de los otros, sino la sombra  proyectada por el fuego  sobre la pared de la caverna  que está delante de ellos?  ...¿y también de la misma manera respecto a los objetos llevados a lo largo del muro? Y si pudieran hablar entre ellos, ¿no crees que opinarían de poder hablar de estas [sombras] que ven como si fueran objetos reales presentes? ...Y cuando uno de ellos fuese liberado, y obligado a alzarse repentinamente, y girar el cuello y caminar, y mirar hacia la luz... ¿no sentiría dolor en los ojos, y huiría, volviéndose a las sombras que puede mirar, y no creería que estas son más claras que los objetos que le hubieran mostrado?... Y si alguien lo arrastrase a la fuerza por la espesa y ardua salida y no lo dejase antes de haberlo llevado a la luz del sol, ¿no se quejaría y se irritaría de ser arrastrado, y después, llevado a la luz  y con los ojos deslumbrados, podría ver siquiera una de las cosas verdaderas? 
 Glaucón: No, ciertamente, en el primer instante. 
 Sócrates: Sería necesario que se habituase a mirar los objetos de allá arriba. Y al principio vería más fácilmente las sombras, y después, las imágenes de los hombres reflejadas en el agua y, después, los cuerpos mismos; en seguida, los cuerpos del cielo, y al mismo cielo le sería más fácil mirarlos de noche ...y, por último, creo, el mismo Sol... por si mismo, ...Después de eso, recién comprendería que el Sol... regula todas las cosas en la región visible y es causa también, en cierta manera, de todas aquellas [sombras] que ellos veían... Pues bien, recordando la morada anterior, ¿no crees que él se felicite del cambio y experimente conmiseración por la suerte de los otros?... Y considera aun lo siguiente: si volviendo a descender ocupase de nuevo el mismo puesto ¿no tendría los ojos llenos de tinieblas, al venir inmediatamente del Sol?... Y si tuviese que competir nuevamente con los que habían permanecido en los cepos, para distinguir esas sombras, ¿no causaría risa y haría decir a los demás que la ascensión, deslumbrándolo, le había gastado los ojos?... Pero si alguno tuviese inteligencia... recordaría que las perturbaciones en los ojos son de dos especies y provienen de dos causas: el pasaje de la luz a las tinieblas y de las tinieblas a la luz. Y pensando que lo mismo sucede también para el alma... indagaría si, viniendo de vidas más luminosas, se encuentra oscurecida por la falta de hábito a la oscuridad, o bien si, llegando de mayor ignorancia a una mayor luz, está deslumbrada por el excesivo fulgor.

La República. Platón. Libro VII, 1-3, 513-18. Trad. De R. Mondolfo.


 



Creo haberlo resuelto, a partir de seres con ingravidez y que carecen de facultades de visión de la luz solar, que se encuentran de espaldas a la boca de la caverna. Pertenecen al mundo de las sombras, a la que tal vez a algunos le toca volver, tal se dice en argentina, una sombra muy pronto serás.

domingo, julio 07, 2013

EN EL FONDO UNA PEONZA

Cuando se desestabilizó el primer neutrón que arrastró en cascada a tantos otros, transformados en peonzas, y comenzó a sonar el primer acorde de la música cósmica, y los fotones cruzaban en todas las direcciones, a partir de ello, YO resolví.

Los amontoné y nacieron las nubes, la ignición de la electricidad del electrón hizo el resto, grandes fábricas comenzaron a insertar peonzas, ya la música fue orquestal.

El helio, con sólida estructura “indeformable” se constituyó en el engranaje de este nuevo andamiento, ahora la música es con contrapunto.

Se sumaron peonzas, con identidad propia en cada estadio, hasta que el límite de la estabilidad lo permitiera y cuando vi que a partir de allí se descomponía, detuve el ingenio.

Fue tiempo de asociar peonzas, y así a partir de las moléculas nació lo se fue convirtiendo en danzantes corpóreos, que hice engordar a partir de las asociaciones, entonces llegaron la célula, la bacteria y los virus. 

Ordené las células y nacieron los seres, estáticos algunos, móviles otros, silenciosos muchos, callados, parlantes, orgullosos y soberbios según la imagen que les devuelve el espejo tantos, lo que no se cuantos tienen presente que en el fondo apenas son una peonza.