Aunque siempre tenemos presente que tal como lo dice Gracian, mas son los que mueren ahíto que los que mueren de hambre.
El culto de la comida es propio de mi familia, que felizmente comparto con mi esposa, quien se formo en un hogar de "GUT ESSEN". Si bien ambos atemperados respecto a nuestros progenitores.
Así generalmente programamos nuestras próximas comidas en la sobremesa.
Esto era de conocimiento de Mister B...,de habituales vacaciones en Argentina, procedente de Estados Unidos, con quien me encontraba asiduamente en el comercio de su yerno con quien intercambiaba opiniones varias y siempre me preguntaba que comería en el almuerzo o cena, según fuera la hora al vernos.
De hecho, contestaba cual era el menú que me esperaba, la pregunta no me resultaba extraña por cuanto en mi familia extendida es de rigor informarse al respecto.
Cierto día me explicó que me realizaba esa pregunta por cuanto constituía para el una curiosidad en tanto en Estados Unidos, ningún hombre sabe que va a comer cuando regrese a su casa.
Al comentarle a su hija ésta me agregó, la esposa tampoco.
domingo, noviembre 13, 2011
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