Antes de entrar a la biblioteca del Monasterio del Escorial, en una logia lateral, cuando llego la orden no fotos, así se convirtió en la única.
Las bibliotecas son un templo para mi, de hecho trabajo en la propia de mi casa, los libros en silencio.
me acompañan y arropan, hasta siento me instruyen.
En mi período de estudiante universitario, asistía a "misa" en la biblioteca mayor de la universidad nacional de Córdoba, un ámbito de silencio sordo, propio de una oquedad en la atmósfera. que inundaba el alma.
La visita del Panteón de Agripa en Roma, y el Monasterio del Escorial en Madrid, son dos memorables experiencias que los dioses sin merecerlo me premiaron a su tiempo.
Por muchas otras he transitado, como la del congreso de Washington o los restos de la de Efeso, en Innsbruck, Sarmiento de La Falda, la de Lima fundada por el general San Martín, en la que deje mi libro sin poder hablar por la emoción.
" Siempre imaginé que el paraíso sería algún tipo de biblioteca. "Jorge Luis Borges
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